1, Flores en una jarra; 2, Vue de Montmartre sur Saint Denis; 3, Nature morte; 4, Le Pont Royal, 1903

André Utter nació en París en 1886 y está enterrado en el cementerio Parisino de Saint Ouen desde 1948. Su vida está unida a la de su esposa, la pintora Suzanne Valadon, y al hijo de esta Maurice Utrillo. Suzanne conoce a Utter cuando tenía 44 años y él veintitrés; por entonces estaba casada con Paul Moussis y su unión había durado trece años. Utter se fue a vivir con ella. Por su parte la pintora le definía como : «hermoso como un dios». Suzanne fue su musa y fuente de inspiración. Utter, Suzanne y Utrillo formaban lo que se llamó «la trinité maudite». En la primavera de 1932 expusieron los tres juntos en la galería Moos. La inestabilidad de Utrillo y su adicción al alcohol preocupaban a su madre y por consejo de ella se casa su hijo con una millonaria, Lucie Valore, quien pondrá orden y estabilidad en su vida. Utrillo llevaba años entrando y saliendo de sanatorios. sin resultado alguno. Suzanne murió en el 38, dejando el cuidado de su hijo en manos de Lucie y de Utter, que le sobrevivió diez años. El último de los cuadros, «Le Pont royal» rodeado de neblina en tonos grises y rosas de 1903, lo encuentro tristemente, melancólicamente bello.