
Relicario con los restos de María Magdalena. Cripta de la Basílica
Carlos II, el conde de Provenza, en el año 1279 tuvo un sueño en el que Santa María Magdalena se le apareció. Instigado por el sueño dirigió unas excavaciones debajo de la cripta de la iglesia de St. Maximin en Francia, donde se encontró un sarcófago. Al abrirlo, un perfume delicioso se esparció por el aíre; el perfume que dicen esparcen los santos y que en este caso era el que María Magdalena derramó en los pies de Cristo. De los restos faltaban la mandíbula y la parte inferior de una pierna; junto a ellos se encontró un papiro y una tablilla de madera ambas con inscripciones en las cuales se decía que eran los restos de María Magdalena, que habían sido trasladados de su sarcófago de alabastro a uno de mármol por temor a los sarracenos. Se estimó que se hizo entre los siglos I y IV. Según la tradición provenzal, María Magdalena, junto con Marta, su hermano Lázaro y el Santo Grial (sangre de Cristo, su hijo) huyeron al sur de Francia para evitar la persecución en un bote sin remos ni velas. Milagrosamente llegaron a un pequeño pueblo costero de la Provenza llamado ahora Saintes Maries de la Mer. Allí continuaron predicando y Lázaro bautizando. Después, María Magdalena se retiró a una cueva donde vivió hasta su muerte. A este lugar se le conoce como la gruta o La Baume de María Magdalena, lugar de peregrinaje desde el siglo V.
Carlos II, al descubrir su tumba, construyó una gran basílica, Saint-Maximin-la-Sainte-Baume en el lugar de la pequeña iglesia. El cráneo se completó con una mandíbula gracias al Papa Bonifacio VIII y se muestra detrás de un cristal en un relicario. Cada año, el domingo más próximo al 22 de julio, se coloca una máscara de oro en el relicario y se saca en procesión.
Durante la Revolución francesa desaparecieron parte de los restos robados por Barras, según dicen. Uno de los dientes de María Magdalena se conserva en un relicario que se puede contemplar en la sala de arte medieval del Museo Metropolitano de Nueva York.
Muy interesante el post ahora que han estrenado una pelicula sobre ella
https://mirinconcinefilo.wordpress.com/2018/03/22/maria-magdalena/
Muchas gracias, pero ha sido pura casualidad. Espero verla
Un fuerte abrazo.
Tremendo el grado de paganismo y veneracion a los muertos que ha venido consintiendo esta ramera de Iglesia que tenemos hoy en dia, tolo les ha valido, sueños que dicen donde estan reliquias, restos de difuntos para completar otras reliquias y asi sucesivamente, hasta el punto de hacer una vez tras otra lo que Dios abomina en su Espiritu, dar culto a los muertos, asi se les quita en procesion, se les pone flores, se visten cadaveres que NO SE SABE NI DE QUIENES SON, rindiendoles pleitesia, adoracion absoluta, teniendolos por casi deidades milagrosas, asi esta nuestra casa despareciendo a marchas forzadas, el catolico que se empieza a frotar los ojos y empieza a ver toda esta bazofia pasa como un sonambulo a formar parte de iglesias protestantes, y al catolico que quiere quedarse en su casa se le dice que es excomulgado si no tiene fe en la intercesion de »estos cadaveres ambulantes» increible pero cierto.Dios nos pille confesados.
Hola María. Entiendo tu indignación porque hay cosas que son dificilmente creíbles Y eso ha hecho que muchos se hayan ido apartando de la Iglesia. Yo todo esto le veo desde fuera porque no creo en la iglesia precisamente, si en el ser humano capaz de sentir amor por el otro, sea de cualquier raza, país, religión o no…
Un abrazo grande, querida María.