Estaba cantado, después del otoño inexorablemente llega el invierno. Hace un día y algunas horas que se instaló en el calendario, como no podía ser menos. ¡Hala, pues a disfrutar de las aspirinas, de la leche caliente con coñac y de las mantas eléctricas. Y, si la gripe pasa de largo, a pasear por el campo, que no hay nada más sano y saludable. Como este otoño no ha sido por aquí generoso en lluvias, ansiosa espero un aguacero como dios manda para salir a buscar caracoles. Estoy escuchando a Juliette Greco y sueño con los hechos a la francesa, con mantequilla y perejil… Ella canta como musa existencialista de Saint Germain, como reina de «les caves», y yo sueño con gasterópodos a la «llauna». Voilà, asi es la vida de sencilla, si uno no aspira a más. Un buen libro, la mirada agradecida de la perra, una conversación inteligente con amigos y a esperar que llegue la primavera.
Bellísima foto, Bárbara. Oh, caracoles a la «llauna», ¡cómo los añoro! Debe hacer más de 30 años que no he comido. Y desde luego, tu plan para pasar el invierno es digno de apuntarse a él.
Creo que nunca he comido caracoles fuera de Tamarite. Por lo que no puedo más que estar de acuerdo contigo en el elogio. ¡Gracias por apuntarme!
Feliz Nochebuena y Navidad a ti, a los tuyos y a los participantes en tu bloc, en todas los temas. Leyendo vuestras intervenciones he aprendido a admirar vuestra sabiduría y buen hacer y a quereros. Un abrazo
¡Tenemos que tomarnos unos juntos! Queda pendiente.
Querido Joaquín, sin personas como tú y otros blogueros esto no tendría sentido. Gracias a vuestra generosidad sigo con la misma ilusión de hace unos meses cuando esto comenzó. He ido poco a poco y terminaré el año rebasando las 13.000 visitas. Para un blog dedicado al arte, que sigue siendo algo minoritario, el resultado me parece increíble y estoy muy agradecida a todos. Lo mejor ha sido hacer amistad con gente muy interesante de otros países.
Y también hemos aprendido a conocerte y a quererte. Felices Fiestas en compañía de los tuyos. Un abrazo grande.
Heureusement qu’il y a des lieux comme celui-ci, qui rappelle à qui veut l’entendre à quel point l’art est essentiel à la respiration du coeur et de l’âme !
Tout à fait d’accord! Et en plus la nature nous donne le souffle et l’inspiration suffisente pour vivre avec joie. Énorme bisou.