Morandi: 1) «Naturaleza muerta», 1920. 2) «Flores», 1950. 3) «Naturaleza muerta»; 4) «Naturaleza muerta y y botella blanca y azul pequeña», 1955.
La biografía de Morandi es la de un hombre más bien solitario que dedicó su vida a la docencia y al arte, pero poco o nada dado a las reuniones sociales, salvo quizás en la época en que trata a Giorgio de Chirico, padre del movimiento metafísico y a los futuristas. Alguien lo ha calificado como un Cézanne bajo el filtro metafísico. Realmente su obra se centra en las naturalezas muertas, bodegones donde los objetos cotidianos son los sujetos de sus cuadros. Para muchos es considerado el mejor pintor italiano del siglo pasado. Nacido en Bolonia (1890-1964), en 1907 ingresó en la Escuela de Bellas Artes de dicha ciudad y desde 1909 instala su estudio en la Via Fondazza. Es el pintor del vacío y del silencio, su pintura es estática y lejos del movimiento. Los grandes pintores del Renacimiento italiano como Giotto, Uccello y Caravaggio y los contemporáneos como Picasso, Braque y Cézanne tuvieron gran influencia en sus primeras obras, pero pronto se apartó del paisaje y de la figura humana. Fue nombrado instructor de dibujo para las escuelas primarias de Bolonia. En Florencia participa en 1914 en la primera exposición futurista; con posterioridad, tras la Primera Guerra Mundial, al convivir con de Chirico, se unió al movimiento de la Pintura Metafísica que cuestiona los movimientos de vanguardia, y defiende la tradición clásica italiana. Amaba las líneas austeras de la arquitectura grecorromana. Con el tiempo su estilo se define y se centra en botellas, jarrones, vasos, etc. sobre una mesa o velador, centrándose en la luz y en el espacio. En 1930 empezó a enseñar en la Academia de Bellas artes de Bolonia donde permaneció durante veintiséis años. Expuso en la II Mostra del Novecento Italiano, en el 26 y el 29. En 1930 obtuvo la Cátedra de técnicas de grabado en la Accademia di Belle Arti de Bolonia. Participa en la bienal de Venecia en 1928, 1930 y 1934. Le otorgan el premio Carnegie Pittsburgh en 1929, 1933 y 1936, y en la Quadriennale de Roma en 1931, 1035… Premio de Pintura en la bienal de Venecia y en 1957 el gran Premio de la ciudad de Sao Paulo. Renunció a su cátedra y siguió pintando hasta su muerte, acaecida el 18 de junio de1964 en Bolonia. En el 2001 se inauguró el Museo Morandi.
En la actualidad, en Madrid, en la Fundación Mapfre, se muestra una exposición del pintor desde el 24 de septiembre al 9 de enero. Yo no me la perdería.
Es un pintor por el que he sentido siempre una extraña atracción. Lo encuentro muy interesante a la vez que me inquieta, me desasosiega incluso. Sus objetos viven en sus cuadros como pensando en ellos mismos solo…
Gracias por traerlos a tu blog.
Si, me da la sensación de que en el espacio acotado por el pintor los objetos están aislados por la atmósfera, la luz que los rodea. Muy interesante eso que dices, es como si estuvieran ensimismados, una cualidad que solo se da en los humanos. Gracias y un beso.
«Humanizar» (?) objetos mediante su total aislamiento, lo que «les obliga» a ensimismarse para estar vivos. Interesante.
Estamos de acuerdo! Un abrazo.