Foto, Bárbara
El espacio Van Gogh en Arles, en la Provenza, contiene el «Autorretrato con pipa» de Vincent Van Gogh y el «Autorretrato con Sombrero de paja» . Pasear por Arles es seguir las huella del pintor y sentirlo en todos los rincones, plazas y callejuelas; es asomarse al Ródano y cruzar a la otra orilla. Es sentarse en la plaza del Ayuntamiento, la plaza de la República, y ver pasar volando a los cuervos. Ir a la plaza del Forum y sentarse en un bar mientras en el café Van Gogh te lo imaginas pintando » La noche estrellada». Luego, tras esta parada, subir hasta el anfiteatro romano y descubrir intacta su belleza… Todo esto y más es ir a Arles porque a las afueras te espera «Le pont Langlois» que pintara tantas veces y que sigue igual y si cierras los ojos hasta puedes ver a las lavanderas que hacen su trabajo a la orilla del río.