¡Un millón de lunas de chocolate, mi niña preciosa!!!
Otro año más Noa, pero este con retraso; otro año más para decirte todo lo que te queremos. Estos días desde la terraza del estudio veíamos la luna llena, redonda y brillante, como aquella otra que tú me dabas a comer en trozos porque decías que era de chocolate. Sentadas las dos en el patio alargabas el brazo, con cuatro años, y cogías para mi trozos porque decías que estaban buenísimos. Este año con el virus todo ha sido diferente, pero igual de intenso y delante de ti, una tarta de chocolate como aquella luna que imaginabas para mi. ¡Toda la Felicidad del mundo, mi niña preciosa!
Dear Barbara, this is beautiful!
Gracias, querido amigo, cada año felicito así a mi nieta a la que adoro.
Un gran abrazo.
También yo ando con retraso este año, chiquitina. Menos mal que siempre está ahí la abuela con la flor más bonita que encuentra para ti. Un abrazo para las dos, tan grande, tan grande como ese que nos tuvimos que dar a distancia por culpa de ese bicho tan follonero.
¡Y espero que sea por muchos años! Gracias mil abuelo. Un besazo.