«Hay que deshacer la casa» es una obra de teatro de Sebastián Junyent, escrita en 1983, que me sirve muy bien para explicar el largo silencio de este blog; en él ya di cuenta en su momento de la muerte de mi madre; lo que no podía imaginar es que deshacer, vaciar la que fuera la casa de mis padres sería tan largo en el tiempo ni tan doloroso. Cada objeto, cada rincón suscitaba un sinfín de recuerdos y, cuando llegaba a la mía, ya no tenia ganas ni fuerzas para nada. Después, con el obligado cumplimiento de la reclusión en la que el maldito virus nos tiene atrapados, cuando he querido retomar «La Estirga» tenía todo bloqueado. Gracias a mi compañero de fatigas y su gran paciencia he podido, por fin, ponerme de nuevo en contacto con vosotros, a los que quiero agradeceros de corazón vuestro interés. Esta pandemia nos remite a otros tiempos, casi olvidados, ahora que parecía que estábamos a salvo de casi todo, que la tecnología nos remitía casi al paraíso, esto tan terrible que nos azota a nivel mundial nos lleva ha reflexionar. Hay una lección que sacar de todo esto que ha puesto patas arriba nuestro vivir cotidiano: la enorme solidaridad que se percibe en los cuerpos sanitarios y de seguridad que, aun a riesgo de sus vidas, están haciendo un trabajo increíble. ¡Mi aplauso para todos ellos!
Certainly the virus has made everyone think about life! How trivial my back ache, how insignificant my loss of hearing. How can I think of these things when it seems like the whole world might be dying?
Pienso como tú, esto nos hace relativizar nuestros problemas ante esta pandemia mundial, pero espero que pronto estés mucho mejor, lo deseo de todo corazón. Muchas gracias, estimado amigo.Un abrazo
Es una buena noticia -tras las malas que comentas con y tras la muerte de tu madre- tu retorno a este espacio de cultura compartida que es La Estirga. No conozco la obra de teatro que citas, pero entiendo su significado y la oportunidad. En estos días de retiro doméstico el cambio de rutinas nos acerca a otros rincones de la casa menos frecuentados para sacudir el polvo, ordenar los recuerdos y despertar afectos. Desde casa y deseándote mucha salud, mi abrazo.
Estimado Julio, volver con estas muestras de cariño es todo un bálsamo que me reconforta y no sabes cuanto.Gracias de todo corazón. Por estos lares está lloviendo durante tres días seguidos, cosa realmente extraña, ya que solemos tener las máximas temperaturas, pero hoy me siento tan bien acompañada que sonrío frente al teclado…
Mis mejores deseos con un abrazo grande.
¡Me uno a los aplausos! Mucho ánimo para ti y saludos 🙂
¡Están haciendo una labor maravillosa! Muchísimas gracias. Un fuerte abrazo.
son dias tristes, espero pasen pronto. Mis mejores deseos para estas fechas
Todos lo esperamos, querida y admirada Leyla. Lo mismo te deseo. Un gran abrazo.
Es una alegría como siempre leerte.
Alberto Mrteh (El zoco del escriba)
Perdona , estimado Alberto, no tengo excusa, pero se me pasó tu cariñoso comentario. Con muchísimo retraso te mando un cariñoso saludo. Fueron días amargos.