Gaudí se inspiró en “20.000 leguas de viaje submarino” de Julio Verne para la decoración de la casa Batlló; las formas del mundo submarino y la fantasía de dos visionarios se unieron para, salvando el tiempo, fundirse en un abrazo creativo fabuloso. Estos techos que recrean un remolino y la fuerza del mar lo consigue con esparto y escayola para ir modulando el movimiento del agua.
Supongo que a estas alturas, decir que me encanta Gaudi, no es en nada original, pero es que Gaudi era un visionario, una especie de Julio Verne de la arquitectura. La muestra son estos techos de la casa Batlló, una maravilla.
Aunque no me prodigue mucho en comentarios, tu blog es uno de mis favoritos.
Un abrazo.
Entonces somos legión los que no somos nada originales! Soy fan incondicional…
Me pasa lo mismo Manu, me falta tiempo y además ando un poco fastidiada de los ojos, pero te sigo con entusiasmo,,, escribes tan requetebién que se agradece muchísimo!!!
Un cálido abrazo.
Totalmente de acuerdo con vosotras acerca de Gaudí. “20.000 leguas de viaje submarino” era, cuando era pequeño, una de mis novelas preferidas. Y, ciertamente, la foto que nos envías, Bárbara, podría perfectamente haberse tomado en el salón del “Nautilus” mientras el Capitán Nemo agasajaba al profesor Aronnax.
Un abrazo a todos y feliz fin de semana
La obra de Gaudí no deja de sorprendernos ¿verdad? Veo que conoces de sobra la novela de Julio Verne que es una gozada con ese Nautilus de ensueño…
Feliz finde y un fuerte abrazo.