Envidio a todo ser viviente cuyo elemento natural es el agua. Dicen que la vida surgió en el mar y debe ser así cuando tantas veces lo añoro; me he sentido anfibio, pez, medusa, estrella de mar o una simple lapa agarrada a las rocas. Y cuando veo a los patos ( en general todos los palmípedos que se deslizan lo son por mi ignorancia) me entra un sentimiento grande de nostalgia y otra cosa que no dudo en calificar de pura envidia. Me paro a contemplar su ir y venir tan elegante, su condición de seres libres no sujetos a horarios ni a hipotecas que veranean todo el año sin pagar por ello. Los miro y me digo que el mundo está mal repartido.

Me encanta tu comentario, ¡las últimas lineas son poéticas! Además, con cerca de 40 C, ¿a quién no le gustaría ser pato? Muy buena foto: ilustra perfectamente tu comentario.
¡Esta ola de calor no nos está afectando, cosa rara! Hoy la palma se la lleva Ourense con 41.
Gracias, Joaquín.
Un abrazo.
😛
All the best,
Hanna
Lo mejos para ti también, Hanna.
Un abrazo.
Really a cute photo… 😉
¡Me dan una envidia, todo el día nadando!!!
Gracias, Ledrake.
Vous m’avez donné envie, Barbara, de me replonger dans l’ oeuvre de Théophile Gautier … 😉
Amicalement,
Odile
Ça c’est beau, J’aime beaucoup Gautier!!!
Merci, Odile.
Bonne soirée.