Esperando el Ave

Estación de LLeida. Foto: Bárbara.

Estación de Lleida. Foto: Bárbara.

En las estaciones ferroviarias el tiempo circula de otra manera o eso nos puede parecer. A veces el reloj es protagonista, como en «Solo ante el peligro», y cada minuto se estira como una goma; otras nos rebota en la cara y apenas tenemos conciencia de que nos trasladamos de un paisaje a otro. Hay rutas puramente turísticas e itinerantes y otras que nos dirigen hacia la gente que queremos. Esta foto responde a estas últimas, que son entrañables y nos hacen viajar con el amor en cada tramo.

8 pensamientos en “Esperando el Ave

  1. Precioso comentario, Bárbara. El tren es mi vehículo preferido para viajar. Es un placer para la vista y la imaginación, tanto si miras hacia tus compañeros de vagón como si lo haces por la ventanilla hacia afuera. ¡Cuántas historias se pueden recordar o imaginar!

    Personalmente, me da pena que se hayan perdido (o se estén perdiendo) las viejas estaciones con los andenes llenos de gente, los besos desesperados, las lágrimas compartidas a un lado y otro de las ventanillas… Ahora las estaciones de ferrocarril parecen aeropuertos y las familias, los enamorados y los amigos tienen que despedirse antes de bajar a los andenes.

    Espero que pronto el AVE llegue a Murcia (si no lo ha hecho todavía). Una de mis estudiantes es de Murcia y me ha hablado maravillas de tu ciudad. A ver si algún día (soñar es gratis) puedo visitarla y volver a verte personalmente después de tantos años. Sería estupendo. Un abrazo

    • ¡Eres todo un romántico, Joaquín! A todos los que lo somos, en mayor o menor medida, nos gustan más los trenes de antes y los andenes llenos de gente y las despedidas y llegadas efusivas… Que nuestra imaginación tenga tiempo de volar contemplando los distintos paisajes… ¡cuanta razón tienes!
      Por lo menos ya lo tenemos en Alicante; creo que nos queda aún un año. Animaros; una buena época es en semana Santa; aquí estamos con los brazos abiertos.
      Un abrazo grande.

Replica a barbaragarciacarpi Cancelar la respuesta