Reproducciones de Mary Abbott: 1ºSin título”; 2º Lucy; 3º “Diamantes y Pájaros2; 4º “Sin título”.
Mary Abbott fue una mujer extraordinaria, que lo mismo hacía de modelo para la revista Vogue que hacía de anfitriona para cenas en su casa de la calle Décima de Manhattan en N.Y. donde reunía a pintores e intelectuales. Nació en el verano de 1921. Esta artista estadounidense fue miembro de la Escuela de Expresionistas Abstractos de N.Y. a finales de los años 40 y 50. Desde muy jovencita, a los doce años, estudió en la Art Students League y más tarde siguió las enseñanzas de George Grosz. Aprendió de grandes maestros como Cimabue y Tintoretto pasando por Delacroix, Cézanne o Matisse. En 1943 se casó con el también pintor Lewis R. Teague. Amante de la obra de Marcel Proust y de la de Picasso. Fue confidente y musa de De Kooning y su obra influyó en la de Willem sobre todo en la década de los cincuenta. El gestualismo, su enérgico trazo arrastrando la pintura, su colorido vivo, su constante exploración lo expresó así: “la intensidad de la Naturaleza Viviente a través de mí misma, utilizando el medio, la pintura, el color, y la línea que definen la poesía del espacio vital”. Después de la Segunda Guerra Mundial se unió al “Grupo del Centro”. Fue una de las tres mujeres miembros del Artist’s Club en N.Y., junto con Perle Fine y Elaine de Kooning. Realizó muchas exposiciones individuales y colectivas en EEUU y en el extranjero, incluida en la The Persistence of Abstraction en el Museo Estatal de Bellas Artes de Pushkin, Moscú. En 2011 recibió el premio Art Hampton Lifetime Achievement Award que galardona la obra realizada por una artista cuya contribución ha sido importante en las artes visuales.