Luna del lobo y Lobo Lunar.

Lobo Lunar estaba inquieto. Se acercaba la noche del trece al catorce de enero y sabía que es entonces cuando la luna llena, la primera del año, alcanzaba su plenitud a las 23:27. Era la Luna del Lobo. Por todos es conocido que, en las noches frías de enero, el aullido de los lobos se podía escuchar en los pueblos de Europa y América, y que en los pueblos anglosajones desde tiempos remotos, la Luna llena de enero se denominó «Luna después de Yule», el nombre dado a la Luna llena tras el solsticio de invierno. La gente creía que los lobos aullaban por hambre en invierno, pero Lobo Lunar lo hacía por que se acercaba el plenilunio y que entonces su astro se iluminaba y llenaba el cielo con una luz sorprendente y bellísima. Lobo Lunar sabía que las vocalizaciones de los lobos servían para comunicarse, reforzar vínculos sociales y coordinar la caza, pero él lo hacía por amor a su astro; salía de la lobera y sobre un risco aullaba y aullaba como nunca lo hiciera otro; después, cuando el astro intruso, el Sol, ponía otra luz al día, rendido, exhausto, volvía a la lobera cansado, pero consciente que otro año había cumplido con su misión. ¡Había reverenciado a la Luna del Lobo, su Luna!

4 pensamientos en “Luna del lobo y Lobo Lunar.

Replica a barbaragarciacarpi Cancelar la respuesta