
La Tour Eiffel. Foto: Elena C.

Pont d’Alexandre III. Fotografía: Elena C.

L’Ôpera Garnier. Fotografía: Elena C.
Mi querida «corresponsal» parisina me ha enviado estas tres fotos de Paris la nuit. Están sacadas desde un coche y se lo agradezco de corazón. Ella sabe de mi debilidad por la ciudad de la luz. Espero ir pronto, ya tengo «morriña». Hay ciudades que te atraen, te atrapan como un imán o como una droga y a las que vuelves irremediablemente una y otra vez. La Tour en las noches de verano arde a lo bonzo y es un espectáculo fantástico. El puente de Alejandro III es, de los treinta y tantos que tiene París, el más bonito. El edificio de la Ópera Garnier es precioso por dentro y por fuera, con una gran escalinata que ofrece, a modo de bienvenida toda la riqueza y belleza del repertorio operístico mundial. Recuerdo cuando fui a ver «La Walkiria», a deleitarme con Wagner que, por cierto no es una ópera fácil, yo soy más verdiana; como entonces yo era estudiante fui al gallinero y lo que se me ha quedado grabado es la enorme araña de cristal y los techos pintados por Chagal: una maravilla. La otra ópera de París no la conozco por dentro, pero, quién sabe, a lo mejor programan «La Traviata» y cumplo mi deseo, porque ir a la Fenice no creo, aunque sería también un sueño.
Me has dado envidia con lo de la Opera Garnier y también a mí me han dado ganas de visitar Paris.
Alberto Mrteh (El zoco del escriba)
Por dentro es una preciosidad y si además eres amante de la música: una maravilla. Espero algún día conocer la Ópera Bastille como poder ir a París la próxima primavera. Muchas gracias, Alberto
Seguro que lo disfrutarás.
Eso espero.