

Caravaggio, «Santa Catalina de Alejandría». Óleo sobre lienzo, 173 x 133 cm. Museo Thyssen-Bornemisza. Madrid.
Fue pintado en 1597 y es una de las cuatro obras seguras que se conservan en España. Estaba colgado en el Palacio Barberini de Roma. En 1930 el gobierno de Mussolini autorizó la exportación de varias obras de este palacio que pasaron a una galería de arte suiza siendo adquirida poco después por la familia Thyssen que la incluyó en el museo de Madrid en 1992. El mecenas del pintor, el cardenal Francesco Maria del Monte apreciaba esta obra de manera muy especial. Su estado de conservación es muy bueno en general y fue sometido a una limpieza de barnices en 2018. En el cuadro la santa está rodeada de los objetos con que fue torturada como la rueda de puntas aceradas y la espada con la que fue decapitada. La santa representa la belleza natural y serena de una joven del pueblo igual que hiciera Andrea del Sarto con sus madonas. Esta obra fue el preludio de las que siguieron para las iglesias romanas. Destacaría el bello colorido de la falda así como los pliegues de la blusa y el halo que circunda su cabeza señal de la santidad. La identidad de la modelo corresponde a la de Fillide Melandroni, cortesana que frecuentó el círculo de Caravaggio.











































