A pesar de las lluvias de estos días que azotan el Levante, esta mañana el paraguayo me ha dado los buenos días con este regalo. No me olvido, sin embargo, de la desolación de las tierras anegadas en el altiplano ni tampoco de Valencia., con ellos está mi corazón. ¡Que esta flor sea un buen augurio de primavera!

Qué bonita flor. Seguro que es un buen augurio para esa zona tan castigada con las lluvias. Un abrazo, amiga.
Es un árbol precioso; las flores salen blancas y después se vuelven de color rosa. Muchas gracias, querida Marylia. Un abrazo grande.