Seguimos con recetas para épocas de crisis. Los huevos constituyen una fuente de proteína de primera calidad (la más completa y la que puede evitar que en un futuro tengamos problemas con la mácula) y posiblemente la más barata, aparte de la que consigamos recolectando en el campo, con mayor o menor acierto, gasterópodos, batracios e insectos -estos últimos en nuestra cultura no tienen muy buena prensa, pero todo se andará-. Atontar con alevosía nocturna conejos en una carretera secundaria con los faros del coche es otra actividad que favorece su caza sin pasar por el supermercado; para los que detesten la violencia, mejor recurrir a los huevos; por eso la receta de hoy es una muy buena opción que, por regla general, gusta mucho a los niños.
Huevos al caballo
Ingredientes para 6 comensales: 6 huevos o 12 según si estos son triperos o frugales; salsa bechamel, pan de molde y ketchup. Para la bechamel: harina y grasa (mantequilla o aceite) en la misma proporción, medio litro o un litro de leche, según la cantidad de huevos que se vaya a hacer y una pizca de nuez moscada ; la salsa ha de quedar espesita.
Hacemos primero la bechamel y una vez hecha le añadimos un poco de ketchup para que quede de color rosa. Freímos los huevos mientras vamos tostando las rebanadas de pan de molde en el horno o en una tostadora. Emplatamos poniendo sobre cada una de las rebanadas un huevo y cubrimos generosamente con la salsa. Hay que tomarlo bien caliente.
